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Mostrando entradas de marzo, 2022

CUENTOS PARA EMOCIONARSE: JUANA SIN MIEDO.

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  Juana desde que nació había sido ya un bebé diferente, no se asustaba nunca, no mostraba miedo por nada. A la gente le parecía fascinante, alguien sin miedo, y la llamaban “Juana Sin Miedo”. Podrías pensar que esto le gustaba. ¿Crees que el miedo es malo?, ¿es bueno?... como dice Buda:  “Xa se verá”  (pero ese es otro cuento, mi famoso cuento de por qué sostengo y creo a pies juntillas que Buda era gallego). El caso es que Juana cuanto más iba creciendo más claro iba teniendo que no le gustaba eso de no sentir miedo, algo de lo que todo el mundo sentía, podía hablar y compartir, y se entendían. Pero ella no lo entendía, y sentía que la miraban raro, con recelo, porque ella no sentía miedo, incluso eso les daba más miedo. La tachaban de bruta porque ella se lanzaba a todo lo que se le ocurría sin dudar, podía hacerse amiga y jugar con las fieras o con cualquier monstruo, podía entender como se sentían al ser mirados como bichos raros… Ella quería sentir el miedo y entender a las de

EL FALSO YO

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    Superar la idea que tengo de mí, abre la puerta de la cárcel que fabricamos para protegernos. Significa en la práctica conseguir zafarnos del gendarme del “ego”, que es nuestro temperamento y estructura de mecanismos de defensa que componen lo que llamamos “personalidad”. ¿Razonarías con alguien que está borracho? Pues eso es lo que tratas de hacer cuando intentas razonar con el ego y los mecanismos de defensa, tuyos o de otra persona. No se puede razonar con tu parte insensata que se resiste y opone, que se separa con muros y defensas, percibiendo un mundo fraccionado, un mundo de objetos, de imágenes fijas (prejuicios), un mundo sin sentido, por lo tanto, amenazante; en vez de enfocar todo el cuadro, la realidad completa, percibiéndonos como parte del universo, abriéndonos al misterio de quién soy yo realmente y cuál es mi verdadera libertad. Como parece imposible saber quién soy, prefiero quedarme con una mísera historieta de mí. ¿Pero cómo desactivar la falsa historia d

¿DIFICULTADES CON LA CULPA? JUZGAR Vs LA VERDADERA TOLERANCIA Y PERDÓN

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  ¿Tendría sentido que te culpabilizaras por caerte cuando estabas aprendiendo a andar? ¿Tendría sentido que te hubieras parado a sobre-racionalizar y decirte, o que permitieras que te dijeran, que eres un/a inútil, débil o que “no puedes” por haberte caído aprendiendo a andar? Cuando algo nos molesta o incomoda, o nos quita la paz, hay que poder mirar qué error o equivocación podría haber ahí (que nos informa), más que con culpa con responsabilidad referida a qué está en manos de cada quién para el aprendizaje.  Ante esta molestia que puede implicar información a incorporar,  se abren las siguientes opciones, partiendo del siguiente ejemplo: Un caso posible es que no hayamos hecho el mantenimiento del tejado de la casa y empezamos a notar goteras.   a) No querer mirar el error o equivocación y hacer como que no está, o no querer comprobar si sólo es un miedo y que no hay nada que temer.  -> Generalmente aquí lo que se ha dado es una negación por sentir que nos supera, por culp

RAZONES PARA PERDONAR

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  En estos tiempos que corren en los que sería tan fácil condenar, me atrevo a lanzarme al elogio del perdón.      Planteémonoslo: ¿Cómo sería perdonar? ¿Te sentaría bien? ¿Haría bien a ti y a otras personas? ¿Significa resignarse y consentir, o significa comprender para avanzar?      Atendiendo a la salud, el perdón es un factor clave de bienestar y salud mental, pues implica el desarrollo de funciones superiores del cerebro. Según recientes investigaciones en la neurobiología del perdón, pocos actos son, en realidad, tan saludables. Este estado mental al que podemos llegar, no sin relativo esfuerzo, meditación y voluntad, reconduce positivamente el estrés y emociones como la ira, la vergüenza, etc. Pero además, la neurociencia nos señala que este proceso es capaz de modelar y perfeccionar el cerebro.      Perdonar no significa aceptar que un comportamiento fue el adecuado, ni ignorar un daño que ya está hecho. Sin embargo, puedes notar cómo te atrapa la carga de “las cuentas q